Yo me encontraba sentado cómodamente en una banca de un jardín.
Esos jardines que hay en cualquier parte.
Viendo como el atardecer de un sol opaco baja su luz tenue a un rojizo naranja. Cuando de repente…
¡Un hombre cayó del cielo! ¡Si! ¡Un chismequiro carnalillo cayo del cielo!
Un hombre cayó a la tierra. Alguien sin paracaídas.
(Talvez era un ángel vestido con apariencia humana.)
Me saco un pinché susto. Imagínense la situación, ¡vivo! Totalmente vivo.
El wey miro para todos lados se sacudió un poco y siguió para donde se encontraba una bicicleta y se fue por donde vino.
O.o
En realidad me quiero quejar de los hinches weyes que se suben a las palmas por acá en colima.
Lo hacen para sacar un jugo que se encuentra entre los cocos y las palapas de una palma.
(Cosa muy común en colima por tanta palma)
De esto hacen una rica tuba. Bebida típica regional.
Pero ver como estos changos humanos se suben a las palmas es otro espectáculo: Tú estas a gusto sentado en alguna banca y de repente algún fulano baja de quien sabe donde como si nada hubiera pasado.
Cuando vengan a colima sabrán de que hablo. Por lo pronto.
No se queden debajo de una palma.>_<