Una muestra es este lugar donde el diseño se desborda con un procesador, un buen tiempo y ganas de sacar lo antes pensado. Un buen portafolio de proyectos con grandes diseñadores gráficos. (En la actualidad ya no cuentan con la página web propia y se dedican a expandirse por medio de redes sociales).
CGsociety
Una muestra es este lugar donde el diseño se desborda con un procesador, un buen tiempo y ganas de sacar lo antes pensado. Un buen portafolio de proyectos con grandes diseñadores gráficos. (En la actualidad ya no cuentan con la página web propia y se dedican a expandirse por medio de redes sociales).
Internet 2024
Hoy, esto es poco usual en una realidad a un mundo cada vez apurado a recibir todo ya sea por Tik Tok o en pocas palabras dentro de una red social sin saber que sea falso o verdadero. Lo llamado "viral" es el estandarte a lo que antes fue el bum de ese Internet. Claro, lo viral pertenecía a las páginas individuales o dentro de plataformas web.
Ya no se tiene tiempo para entender este "Internet" que está aquí en la red. No descubrimos. Nos acostumbramos a pertenecer a redes cautivas. Ser esclavos de la opinión de otros con millones o miles de likes o por bots y algoritmos que nos cautivan y fomentan lo que quieren que pensemos.
Ahora con esta nueva modalidad "IA" estaremos en trayectoria a ser cada día más predictivos y crearán servicios de respuesta más acorde a nuestra personalidad, incluyendo generar nuestra identificación más adaptable al consumo seguro de una empresa en cuestión.
La propuesta está aquí. Habrá alguien que le interese en descubrir que fue ese Internet y pertenecer a un origen que le de respuesta de su lógica como autoconocimiento.
Bienvenidos al reaprendizaje
Mi Avalancha Apache
Los días de clases se hacían desesperantes y eternos. Ansiaba tener en mis manos el dichoso volante negro. A mi madre nunca le gustó la idea que estuviera toda las tardes en la calle con mi juguete, nunca le pareció buena. Quizá tenía razón. Pero como era niño pilucho (vago) pues no me importaba tanto.
Frente a mí casa vivía un niño y también tenía su carro deslizador. Su nombre era Pedro, “Pedro pistolas” así le llamábamos por ser muy alebrestado con la gente. Que sin miedo, no dudó mucho en retarme a una carrera de cuadra completa con los tan afamados Avalanchas.
Recuerdo ese día como si fuera ayer. Todavía me sigo preguntando: ¿dónde carajos salieron tantos chiquillos? porque ese día la calle estaba repleta de ellos. Los gritos no se hacían esperar:
—¡Pinche Juan Carlos, gánale al Pedro pelota!
—¡Gana Pedro, y te invito una torta!
Normalmente, en esos tiempos los niños no usaban algún equipo de protección para proteger su cuerpo. Y por la importancia de tal magnitud, tuvimos la necesidad de fabricar los nuestros. Utilizando botes de cartón de leche y cajas de galletas Marías.
Entonces gritaron: 3, 2, 1…