Politica Ficción

Ya estamos apunto de saber de cual burro masca más el sácate. Bueno, es un decir. Para personas que vivimos en este país mêxicano, nos encontramos listos (se supone) para las próximas elecciones en pro de cambiar de gobierno. Según cuenta un caprichudo por ahí, ya iniciaron las campañas clandestinas en donde la impunidad política ya esta dando sus primeros pasos. Y para muestra, lo que fue en este pasado domingo en un horario estelar en donde uno sin más y ni menos, nos pusieron a ojos de mírame a huevo, un spot de asunto político, dando información de como y para que votar. Con advertencia de 5 minutos. Ya comenzaremos a escuchar canciones que talvez nos metan al inconciente y no penetren a nuestros hogares con basura política, dando por resultado el montón de pedradas de que la verdad es la que miente el otro. Dirán las promesas sin cumplir, las soluciones por hacer y los problemas por resolver. Qué afín de cuentas, es lo mismo. Anteriormente fuimos testigos de como nos inundaron con ideas de como hacer lo que se tiene que hacer. Siendo en el mas sentido democrático el dilema y terminar en un estado lleno de confusión y decepción. Este reality comienza cuando usted entra en este juego de saber quien es el mejor y quien le da la oferta de darnos el principio de todo y el final feliz. Hoy mi postura no es participar en estas elecciones, mi decisión empieza en entender más el capricho democrático, si es tan democrático como es, tengo derecho a no votar. No quiero encapricharme decidiendo a fulanos que no conozco y que me ponen en un montón de papel con una crayola. No quiero saber que mi dedo pulgar tenga manchado y pueda enseñar socialmente a cuanto individuo preguntón me diga que si ya vote. Tampoco quiero saber de quienes son los postores ni ganadores. Quiero participar en situación neutral y entender de qué carajos somos civilmente y como estas cosas cambian a la gente. No creo que mi decisión cambie la situación política de este México.