Otro año más en el que uno se vuelve viejo...
¿viejo?
¡Viejos los cerros y en verdecen!
Al carajo con eso, hoy en este día de que fui producto del amor entre mi padre y mi madre, pues estaré festejando al menos con la familia haciéndome unas de mis comidas preferidas.
¡Si que sí!
Por lo otro mejor ni me acuerdo, siguen los problemas con cosas diarias y la vida se convierte en un cementerio de quejas y frustraciones, total eso siempre estará.
Bueno hoy es día de hacer uno lo que se le antoje, (aprovechando) de todo y tal vez no aremos nada, pero que importa, lo que importa es estar bien y no seguir con esa tos de perro con calentura que me dio las pasadas dos semanas. Ya salimos de eso y ahora es seguir trabajando, desvelándose cual vigilante y seguir resolviendo problemas que la vida se va acabar.
¡Saludos y que siga la fiesta cabrones!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario